FLORIDA.- El director de servicios de inversiones y asesor financiero para la entidad bancaria Space Credit Union (SCCU), Michael Simon, asegura que desde temprana edad se pueden tomar medidas financieras que ayuden a lo largo de la vida.
De manera, que aconseja tomar las medidas necesarias para realizar las operaciones financieras más inteligentes desde los 20 hasta los 50 años.
Como ejemplo hipotético, supongamos que tiene 25 años y, durante 10 años, deposita $5,000 al año en una cuenta de jubilación donde ese monto gana un 7% consistentemente. A los 35 años, deja de depositar dinero en esa cuenta; de hecho, no le vuelve a depositar ni un dólar. En esas condiciones, para cuando usted tenga 65 años, los $50,000 que depositó durante esos diez años se habrán convertido en $562.683 sin necesidad de que usted haga más nada. Si deposita $5,000 al año en esa cuenta, desde que tiene 25 y durante 40 años, logrará acumular $1,068.048 para cuando tenga 65 años.
Además de las inversiones en acciones, podría también incrementar sus ahorros – con un fondo de emergencia que equivalga a seis meses de sueldo. Probablemente le parezca un monto innecesariamente alto, o una meta difícil de cumplir; pero vale la pena hacerlo, especialmente si está casado o tiene hijos. Piense que podría sufrir un accidente o enfermedad que lo deje discapacitado – no necesariamente en forma permanente pero que le impida generar ingresos. Según el Consejo de Concientización sobre Discapacidad, cerca de un 25% de la gente sufre este tipo de episodios durante su vida de trabajo y menos de un 5% de ellos están relacionados con el trabajo, de manera que la compensación del trabajador no los cubre. Según Money, solo 13% de los millennials (personas nacidas al fin del milenio) cuentan con un seguro contra discapacidad.
Debería pensar en hacer un testamento y conceder un poder para sus asuntos financieros, por si sucede algo inesperado. Otra medida de planificación o protección de activos que se hace esencial en este momento de su vida es el seguro de vida. Hoy en día, una póliza de seguro de vida por un término de 20 años, por $250,000, para una persona de 35 años, cuesta menos de $30 mensuales. Puede que no genere el mismo valor monetario que una póliza permanente, pero es muy fácil de renovar (y en algunos casos se puede convertir en una póliza de vida permanente).4
Al enfrentar esta presión económica, trate de mantener el esfuerzo por cumplir sus planes de retiro; es decir, el ritmo y nivel de sus aportes a la cuenta de jubilación. Es posible que tenga adolescentes o preadolescentes en casa y, si aún no ha pensado en constituir un fondo para la universidad, que pueda crecer y ganar intereses compuestos a lo largo del tiempo, éste es el momento de hacerlo. Independientemente de cuán onerosos le parezcan los préstamos estudiantiles, no debe usar su fondo de retiro para pagar la educación de sus hijos.
También sería útil averiguar sobre los seguros que cubren los cuidados a largo plazo (LTCs, por sus siglas en inglés). Si usted tiene dinero, o pronto lo tendrá, posiblemente no valga la pena adquirirlo ya que tendrá el dinero suficiente como para pagar, durante varios años, el hogar de ancianos (o cualquier otro sistema de cuidado para ancianos) que necesite cuando envejezca. Si considera que pertenece a la clase media, valdría la pena gastar en el seguro LTC, dependiendo de su historial y perspectivas de salud. Si está interesado en este seguro, lo más sensato es comprarlo antes de los 50 años, mientras goza de buena salud.